México: intenciones de Misa para los sacerdotes de la diócesis de Tapachula

México es un país de contrastes: algunas de sus zonas son populares destinos para pasar las vacaciones, pero, al mismo tiempo, el país es víctima de una sangrienta guerra ocasionada por el narcotráfico y también escenario de secuestros, extorsiones, robos y asesinatos. La Iglesia católica también se ve afectada: México es uno de los países más peligrosos del mundo para los sacerdotes.

También desde el punto de vista económico, México es un país de grandes contrastes: así, por un lado, es una economía emergente, mientras que, por otro, amplios sectores de la población viven sumidos en la pobreza.

Los retos que afronta la diócesis de Tapachula también son grandes. Su territorio hace frontera con Guatemala, lo que significa que lo cruzan muchos migrantes que van camino de Estados Unidos. La Iglesia proporciona atención pastoral y asistencia psicológica a estas personas y también les presta una ayuda material concreta en forma de ropa, alimentos, medicinas y alojamiento, además de ayudarlas con los trámites legales de inmigración. Sin embargo, las parroquias se ven desbordadas y carentes de recursos para afrontar todas estas tareas, y a ello cabe añadir los problemas causados por catástrofes naturales como terremotos, ciclones y corrimientos de tierra durante la temporada de lluvias.

Los sacerdotes no perciben un salario, sino que dependen de la generosidad de los fieles que, a su vez, tienen muy poco. Por tanto, dependen de nuestra ayuda en forma de intenciones de Misas. Sin ellos, los sacerdotes no podrían pagarse el seguro médico ni tributar para la pensión, por lo que quedarían completamente desamparados en caso de enfermedad, discapacidad o vejez. Por eso, se alegran mucho cuando les hacemos llegar las intenciones de Misa de nuestros benefactores.

Nosotros le hemos prometido al obispo intenciones de Misa por un total de $ 30.121.632 (28.800 euros) para los 106 sacerdotes de su diócesis, y Mons. Jaime Jalderò nos ha escrito: “En nombre de nuestra diócesis, os damos las gracias por ayudar a nuestros hermanos del mundo entero a proseguir con su labor pastoral. Que Dios os siga bendiciendo y que nuestra Madre, la Virgen de Guadalupe, interceda por vosotros”.


Abrir chat
¡Hola! Gracias por comunicarte con la Fundación ACN Chile. ¿En qué podemos ayudarte?